«Un 1.º de abril de 1976 empezó mi aventura con el colegio. Ingresé con algunos temores como todos; sin embargo, esos temores desaparecieron rápidamente y el colegio se volvió una de las aventuras más lindas de mi vida.
En el colegio aprendí muchas cosas valiosas para mi vida. Mis compañeros de clase se convirtieron en mis mejores amigos, como hermanos, y siempre están cuando los necesito. Fuimos creciendo y aprendiendo los valores, y experimentando alegrías de la vida escolar.
Todo lo aprendido me sirvió para mi carrera profesional de economista. Mi esposa y yo decidimos que las buenas aventuras se tienen que repetir, así que mis hijas ingresaron al Santa Margarita para continuarlas».
Fabrizio Terán
Prom. XXVIII – 1986